Tras la instalación de persianas es necesario hacer un buen mantenimiento. De lo contrario, las reparaciones se volverán más frecuentes. Uno de los aspectos básicos que hay que llevar a cabo es la limpieza de persianas.

Aunque pueda sorprenderte, la rutina de limpieza puede evitar roturas, atascos y otro tipo de averías frecuentes.

A continuación te damos las mejores pautas para realizar la limpieza correctamente.

Consejos para la limpieza de persianas

En muy buena parte, el tipo de limpieza que realicemos irá vinculado al material de la persiana. Como hemos detallado en otros artículos, los materiales más comunes son el PVC, la madera y las persianas metálicas.

Algunas sugerencias que te serán de ayuda son las siguientes:

  • Para las persianas de PVC o plástico. La rutina de limpieza habitual debe ser a base de agua y jabón. Pero si hay manchas que no desaparecen, utiliza desengrasante para lograr erradicarlas.
  • Si tus persianas son de madera, mejor emplea productos de limpieza diseñados en especial para ella. Acompaña el producto con un trapo húmedo pero sin estar demasiado seco para evitar que la madera se hinche.
  • Cuando las persianas son metálicas, lo que incluye el aluminio, opta por un trapo seco que retire el polvo acumulado. Y si te topas con alguna mancha insistente, el alcohol es el mejor producto de limpieza para hacerla desaparecer.

En todos los casos debe ponerse mucho cuidado de no ejercer demasiada presión. Recomendamos comenzar a limpiar de arriba hacia abajo para obtener mejores resultados.

También cabe destacar que la parte interior nunca estará tan sucia como la que da a la calle.

Si sigues estas recomendaciones de limpieza de persianas conseguirás que te duren más tiempo. Y si necesitas alguna reparación o renovación, no dudes en contactar con Persianas Flores.