Cualquier climatología extrema puede causar complicaciones en el correcto aislamiento de la vivienda, hablamos de frío o calor extremo. Temperaturas que dañan los materiales externos y parece ser una tendencia a quedarse, muy a nuestro pesar. Aunque las persianas cumplen un papel fundamental en este aspecto, hay un elemento que muchas veces pasa desapercibido: las cajas de persianas.

Este componente es clave para asegurar que el sistema de persianas funcione correctamente y que no haya fugas de aire o ruido desde el exterior. Si estás valorando instalar o renovar tus persianas, es importante que conozcas qué tipos de cajas existen y cuál se adapta mejor a tu vivienda.

Qué tipos de cajas de persianas existen

  • Caja exterior
    Es la solución perfecta para viviendas antiguas o ventanas que no tienen espacio para una persiana empotrada. Se instala por fuera, sin necesidad de hacer obra, y ofrece un acabado limpio y discreto. Además, si se elige bien el modelo, puede integrarse muy bien en la estética de la fachada.

  • Caja interior o cajón de obra
    Este tipo es el más habitual en construcciones nuevas. Se coloca justo encima de la ventana, empotrado en el muro o apoyado sobre la carpintería. Su principal ventaja es que permite una mejor integración estética y un mayor nivel de aislamiento acústico y térmico, siempre que se utilicen materiales herméticos.

  • Sin caja
    Para quienes prefieren evitar cualquier tipo de obra, existen persianas sin cajón, como las venecianas o alicantinas. Se enrollan en sí mismas con una cuerda y permiten regular la entrada de luz, aunque su capacidad de aislamiento es más limitada.

En cualquier caso, si vas a renovar o instalar tus persianas, asegúrate de contar con una buena caja y materiales adecuados como el PVC o el aluminio. En nuestra empresa te ayudamos a elegir la mejor opción según las características de tu vivienda, y nos encargamos de una instalación profesional y sin sorpresas. Ponte en contacto con nosotros y te asesoramos sin compromiso.